viernes, 4 de noviembre de 2011

Con Rubalcaba, sí. ¡Y comienza la campaña!

Se comenta en Madrid que en la calle de Génova, en la sede del PP, se terminó el champán que había empezado a correr en botellas gigantes tras conocerse los datos del paro correspondientes al mes de octubre. "¡Lo hemos vuelto a conseguir!", gritaba un destacado dirigente de la formación, que había acudido un momento, entre no hacer nada y marcharse de vuelta a hacerlo, la espuma brotándole por las orejas. Como es bien sabido, todo lo que hace el PP en relación con el paro es perjudicar los modos posibles de combatirlo, además de celebrar con obscenidad el éxito de su estrategia. Como abunda entre los dirigentes "populares" la inmoralidad, al perjuicio causado a los españoles con su actitud irresponsable y desleal se lo llama "política". Se aprecia una vez más el error de concepto entre los "populares".
Es el momento, tras el éxito de la estrategia del PP, consistente en derribar todo el edificio sociopolítico, carcomer los cimientos del país, siempre que puedan quedarse sus dirigentes con el solar, de reflexionar acerca de aquella crítica que si hizo al PSOE apenas estalló la presente crisis económica. Del PP se puede esperar todo, y siempre con mayor probabilidad todo lo bajo y zafio. Ya se ha visto durante años el modo como el terrorismo ha sido alienado por los "populares", que se han apropiado la capacidad de gestionar el dolor de un pueblo, y que han señalado a los demás, quizá a los únicos demócratas que de verdad existen en España, a la manera de cómplices. Y con este antecedende, ¿cómo se le iba a ocurrir a alguien que en el PP estarían dispuestos a colaborar en la buena marcha de la economía? Se acusó al PSOE de haber ignorado la crisis, y hasta dentro del propio partido hubo ingenuos que quisieron hacer un guiño de simpatía a la sociedad admitiendo que las medidas adecuadas debieron ser aplicadas con antelación. Sin embargo, si se tiene presente la actitud del PP, si aquel día de 2008 en que Rodríguez Zapatero dijo que el país se encontraba con una salud envidiable hubiese sido el mensaje otro diferente, o las elecciones legislativas habrían de celebrarse casi dos años antes de la fecha, o la cifra del paro sería hoy superior a 8 millones. Tarde descubrió el PP que también con el desempleo se podía jugar, pero una vez reconocida la gravedad de la crisis, la estrategia de destrucción encontró perfecto acomodo en la, así llamada, "política de austeridad", que es la que mejor sienta a un país tan falto de espíritu como España, un país de irresponsables y sinvergüenzas.
Ayer pudo escucharse al presidente de los empresarios madrileños, Arturo Fernández, en una entrevista en Hoy por hoy. No cabe la menor duda de que los españoles están en manos de unos hooligans que son, por lo demás, bastante burros. El líder de los empresarios no alcanza a comprender, y ya es un desastre que él no lo comprenda, que el modo de vida de una sociedad tiene repercusiones en su totalidad, esto es, que el trabajo no es sólo una actividad que alguien realiza y por la cual recibe una cantidad de dinero estipulada, a menudo de manera bastante caprichosa. El líder de los empresarios madrileños, así como los dirigentes del PP, no alcanzan a comprender las repercusiones sociales de las actividades económicas en una sociedad, mucho menos en una altamente tecnificada y superpobladada como la actual. Estos sujetos sólo quieren librarse ellos mismos, en tanto que empresarios, unos, y otros en tanto que gestores públicos, de cualquier carga, y esto es, una vez más, ignorar la complejísima organización que es toda sociedad, el lugar de la economía y sus propios resortes.
Como parece que los españoles están muy cerca de cometer otro error histórico, entregar todo el poder en Ayuntamientos, Comunidades Autónomas y hasta el gobierno del Estado a un mismo partido, debe imponerse la clarividencia de evitar la fe en una nueva superstición: pueden llamarse a sí mismos "políticos", pero no son otra cosa que piratas.
Basuragurú no se resigna a caer en el derrotismo de los medios de izquierdas: admítase de una vez que en la situación actual, ante la amenaza de una mayoría absoluta de quienes han practicado la piratería con la sociedad española, votar a IU, UPyD o EQUO no ayudará absolutamente para nada. Basuragurú dice: "con Rubalcaba, sí", y todos los españoles de bien tienen que darse cuenta de que no hay ninguna otra opción.


Yvs Jacob