miércoles, 13 de octubre de 2010

"La Espe" defiende la libertad de expresión

Pues no nos habíamos enterado... Algunos creíamos que el de "la Espe" era sólo liberalismo económico -entiéndase "privatización salvaje", acoso, derribo y saqueo "de lo público"-, pero parece que es además un liberalismo de alturas, por cuanto que contempla la libertad de expresión, tan temida siempre por los fascistas como por los secuestradores comunistas. Sin embargo, diferente es defender algo con la pluma a hacerlo con la espada, diferente es decir algo por decirlo a decirlo por ser un hecho. Atiéndase, por ejemplo, a lo que sucede con la televisón pública que el Partido Popular se ha regalado en el "Estado" madrileño. Es más difícil encontrar pluralidad en Telemadrid que un liberal-conservador que no sea dogmático. Quizá los liberales se saltaron algunas páginas de los textos sagrados del liberalismo, pero incluso en esas revelaciones queda bien expresado que no hay libertad de expresión sin libertad de pensamiento, y Telemadrid no respeta ni la una ni la otra. Lo que entiende "la Espe" por libertad de expresión es libertad para decir lo que a uno le viene en gana cuando le viene. Mucho me temo que eso es una estupidez que nada tiene que ver con el liberalismo, y que suena más a simplonería propia de quienes no tienen en verdad nada que decir.
Pero si "la Espe" quiere convencernos de que, en efecto, cree y defiende la libertad de expresión, debería liberar a la televisión pública madrileña que tiene cautiva de su partidismo, y ello supondría eliminar a los opinadores que informan para poner auténticos bustos parlantes que vomiten noticias en su lugar. Claro que hay otra opción: duplicar, triplicar, cuadruplicar... a los opinadores, y ofrecer, junto a las malas intenciones de Hermann Tertsch y Ana Samboal -entre otros-, las más variadas en que pensarse pueda.
Pero si todo sigue como está, es decir, prisioneros de manipuladores los manipuladictos, entonces, no, eso no es libertad de expresión, sino borreguería.


Yvs Jacob