jueves, 19 de mayo de 2011

"La Espe" se hace un lío con la Puerta del Sol

Una razón principalísima por la cual nunca debería votarse al Partido Popular es el descaro con que sus candidatos convierten la política en un modo de vida. Habida cuenta que desde la perspectiva ideológica la derecha española no representa más que a la barbarie, que no es con propiedad una ideología, sino la ausencia de toda ideología, por el carácter primario, casi instintivo de sus apelaciones contra toda razón social, el Partido Popular, al no tener nada que ofrecer, carece también de teóricos, puesto que dejarse llevar y no hacer nada son actitudes de muy difícil comunicación política. No obstante, al contrario de lo que harían las personas con dignidad, esto es, en lugar de dirigir los asuntos que caen bajo la responsabilidad de los gobernantes del Partido Popular hacia un modelo de gestión eficiente, optan éstos por dirigirse ellos mismos hacia un modo de vida, el del representante político que ni representa ni hace política, si bien no hay evento, por muy patético que sea su concurso, en que no se deje ver el gobernante del Partido Popular con la ilusión de acudir en nombre de los ciudadanos. Yo le he dicho a la Espe ya en múltiples ocasiones lo mismo que dijeron los alemanes a sus gobernantes cuando propusieron el rearme a mediados de los 60: que no cuente conmigo.
Ayer pudimos constatar los madrileños de bien que la Espe se había hecho otro lío de los suyos. Pedía a los manifestantes indignados de la Puerta del Sol que se marchasen a La Moncloa. Claro, la Espe, que al igual que todos los miembros del Partido Popular piensa que la democracia es el proceso de meter en una urna un sobrecito con el nombre de la condesa consorte, estaba molesta por la ocupación de su espacio. Así entiende la Espe su poder como gobernante democrático, es decir, que no entiende nada de nada. Estaba molesta, pobrecita, por la invasión de su sede, del espacio de ésta y de su extensión, pero resulta que los gobernantes en democracia no son príncipes ni princesas, y no tienen lugares ni edificios en propiedad, sino para la representación y el gobierno, que tampoco es obra de Dios, sino de los hombres.
Pobrecita la Espe; ella creía que la sede de la Comunidad era suya. Claro, cuando uno pertenece a una familia que colecciona tierras y propiedades... es fácil hacerse un lío.
Toda esta buena gente que anda enfurruñada con la clase política, y que no se manifestaba cuando tenía dinerito en los bolsillos, por mucho que el mundo entonces fuese la misma mierda que hoy, ni hiciese nada que no abocase a la realidad social a lo que es ahora mismo, esta buena gente cuenta con una ocasión de excepción para librarnos a todos de los políticos más nefastos, aquellos que se acercan a la gestión de los recursos y del país sin otro apetito que satisfacer sus propios delirios de aristocracia provinciana.
Votad a la izquierda democrática y pedidle agallas. El primer paso es coger la escoba con la mano.


(Y mañana en Basuragurú: Nace "Reachiona", movimiento ciudadano contra las tiendas de chinos).


Yvs Jacob