jueves, 22 de abril de 2010

A Evo Morales se le va la chola, y ¡qué bueno!

Vaya por delante que me fasina la democracia, y que me fasina todavía más que un indio sea el jefe de la tribu, especialmente cuando la tribu es pobre. Me encanta además que al jefe de la tribu se le vaya la chola, porque en Occidente, la cuna del delirio democrático, a los jefes de la tribu también se les va, y cuando las cholas se pierden, el pueblo lo pasa mejor. ¡Viva Evo!
Por otra parte, el nombre del Presidente del Estado Plurinacional de Bolivia ya tiene su cosa, porque Evo suena así como poético, sin perder lo que sea de regional-cachondo que resultase de la confusión en que han vivido los a sí mismos llamados "latinos" tras los paseos que se dieron los españoles por allí. No obstante, sería todavía más divertido que Evo se llamase María Dolores, que tiene un no sé qué andino -y he sido informado que en Sudamérica hay Marías Dolores con barba y con los huevos negros de pelos (habrá que preguntarle a Jaime Bayly, quien, quizá para evitar la caída del cabello, no se lava mucho la cabeza).
Querido Evo: Yo ahora no sé si de comer pollo a uno le crecen las tetillas y le entran ganas de beber chupando el porrón. Me sorprende, eso sí, que con la mierda de la que nos alimentamos en Occidente no se haya producido ya una mutación en la especie, como muy bien sospecha el señor Presidente. Sí es seguro, no obstante, que ahora hay más gilipollas que antes, y tal vez se relacione ese estado de inquietante felicidad con los transgénicos, aunque no deba serles atribuido con exclusividad.
Querido Evo: También yo me declaro "socialista utópico" y adoro al artesano labrador. La próxima vez que acuda el señor Presidente a España, le ruego me traiga uno de esos jerseicitos tan lindos que hacen ustedes allí, con lana de auténtica llama andina bien alimentada en el monte, que ya no sé si en el futuro hará más frío o más calor.

P. S.: Me alegra saber que también allí conocen la receta de la Coca-Cola. Mi abuelo suele guardar la dentadura en un vaso con Coca-Cola (dice que así está más frequita y juguetona).


Yvs Jacob